Después de un largo paréntesis, por fin seguimos con la serie de posts sobre el coste de una página web. En el primer post dimos ejemplos y precios reales sobre cuánto cuesta una página web, por lo que si estás interesado en saber el precio que puede costar el diseño de un nuevo website, te recomiendo que le eches un vistazo al primer e indispensable post: cuánto cuesta una página web.
Dar un precio exacto es una tarea muy complicada, pero aunque ya nos hemos mojado bastante en dar cifras aproximadas, seguiré desarrollando la guía, para que quede lo más completa posible.
Hemos hablado del precio de los principales tipos de sitios web, de cómo afectará el añadir funcionalidades extra en el precio base. A parte de todo esto, también hemos visto que si queremos ir a un tipo de página web super creativo, con impresionantes animaciones e interactividad, el precio se dispara considerablemente, puesto que ya estamos hablando casi de obras de ingeniería en cuanto a programación.
En esta nueva entrega, vamos a ver todos los aspectos en cuanto a materiales que deberán apoyar una página web y que por lo tanto encarecerán el coste de la misma en caso de no ser aportados por el cliente final.
No hace falta decir que los textos que acompañan a una página web son de vital importancia. Por lo que la pregunta es tan sencilla como la planteada en el titular: ¿quién será el encargado de ofrecer los textos?, ¿los ofrecerás tu mismo, o deberás contratar un servicio de redacción?
Si los textos los ofreces tu mismo, ya sea porque tienes ciertas dotes para escribir y conoces tu empresa y lo que ofrece más bien que nadie, en ese caso y como es evidente, el coste de la página web, no quedará afectado por este aspecto.
Es bueno saber, que existen empresas dedicadas a la redacción de contenido, que nos podrán crear todos los textos o copys del website que vamos a desarrollar y que en caso de no tener buenas aptitudes escribiendo, será la mejor de las opciones. Nos van a ofrecer un texto escrito de forma profesional, libre de faltas de ortografía y errores gramaticales. Además la gracia en el momento de redactar, se va a notar, puesto que el hecho de redactar una presentación de empresa no debería ser un conjunto de letras y palabras aburridas más difíciles de tragar que 4 paracetamoles juntos.
Dicho esto, conviene encontrar un buen equilibrio entre no ofrecer demasiado texto, pero tampoco quedar faltos del mismo. Aquí también encontramos el factor del SEO o posicionamiento web. Ya que contratamos los servicios de redacción, sería bueno, que el servicio contratado, tuviera formación y sepa redactar textos enfocados al posicionamiento web en base a nuestras principales palabras clave.
Una vez resuelto el tema de la redacción de contenido, deberemos tener en cuenta si el mismo deberá ser traducido a otros idiomas, en el caso de que nuestra página web ofrezca la funcionalidad de cambiar el idioma en que el visitante está visualizando la misma.
Así que deberás tener claro que al igual que en el punto anterior, en caso de necesitar de un servicio de traducción, podrás hacerlo o tu mismo (en caso de que tengas un muy buen conocimiento de los idiomas en los que hay que traducir el website) o por el contrario optar por una empresa que se dedique a ello.
Normalmente las emrpesas dedicadas a la traducción de textos, suelen ofrecer un precio por palabra a traducir.
Si tienes una empresa y deseas mostrar las instalaciones, ¿tienes fotografías de las mismas? si la respuesta es sí, piensa si las fotografías hablan bien o mal de tu empresa. Deberán ser fotografías actuales, de buena calidad.
No es nada fuera de lo habitual, encontrar clientes que cuando nos pasan el material fotográfico del que disponen, nos dan ganas de quemar nuestros propios discos duros. No se valen las fotografías de la última página web del 2004. Cuando las hiciste, seguramente eran lo más cañeras, pero ahora se han quedado pequeñas, la calidad está rebentada y Tony Soprano está de modelo detrás un mostrador con bolígrafos pasados de moda. Sí, los bolígrafos pueden pasar de moda, al menos cuando los ves en fotografías retro.
Fuera bromas, lo mejor sería que el diseñador gráfico o web, nos dé su sincera opinión sobre las fotografías de las que dispones y considerar si…
No tiene ningún sentido gastar dinero en una nueva página web si no estás dispuesto a gastar un poco más de dinero para contratar servicios fotográficos que hará que todo el conjunto quede perfectamente unido.
Una sesión fotográfico corporativa no será tan cara como puedes pensar. Las fotografías hablan de tu empresa y la mejor de las instalaciones puede quedar totalmente fuera de liga a los ojos de los visitantes de tu página web si no se hacen de forma profesional.
Ya que estamos hablando de precios. Una sesión fotográfica corporativa profesional, puede costar aproximadamente de 400€ en adelante.
Si no deseas gastar tanto dinero en una sesión fotográfica corporativa, siempre existe la opción de comprar las fotografías en un banco de imágenes. Éstas suelen tener precios muy económicos y si escogemos bien, nos ofrecen una calidad inmejorable.
Los bancos de imágenes, se caracterizan por tener una amplia variedad de fotografías al alcance de un click.
El precio de una fotografía en un banco de imagen, suele rondar los 12€. Si necesitamos 6 fotografías para nuestro website, 72€ será un precio que vale la pena incluir en nuestro presupuesto para la nueva página web, puesto que de este modo va a mostrar una imagen mucho más profesional.
También podemos optar por bancos de imágenes gratuitos. Hace pocos años atrás este tipo de servicios gratuitos, dejaban mucho, muchísimo que desear. Actualmente, la verdad es que están ofreciendo una calidad muy buena y aunque seguramente no pueden competir de forma «real» contra un banco de imagen de pago, vale la pena saber que nos pueden sacar de más de un apuro.
Como podemos ver, el coste total de una página web se va a ver levemente incrementado por la posible necesidad de materiales que apoyen a la misma. Ya sean los textos, traducciones y la imágenes que vamos a insertar en la misma.
A modo de esquema, podremos hacernos las siguientes preguntas:
Dicho esto, lo mejor será dejarse guiar por el estudio de diseño y desarrollo web con el que emprendamos nuestro proyecto de creación web, puesto que ellos estarán perfectamente capacitados para darnos una opinión profesional al respecto de si es necesario o no es necesario invertir en todo lo comentado en el post.
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